El sector manufacturero español sufre una fuerte desaceleración en el arranque de 2025
El sector manufacturero español ha arrancado 2025 sufriendo una fuerte desaceleración. "El nuevo año ha empezado con debilidad. El dinamismo del sector manufacturero español se ha ralentizado significativamente en el primer mes". Como muestra el índice PMI, hubo un ritmo de crecimiento marginal, que, de hecho, es el más lento desde agosto de 2024.
Concretamente, se situó en 50,9 en enero, una lectura bastante inferior a la de 53,3 registrada en diciembre de 2024, debido a que "la producción se encamina hacia el estancamiento y a que los niveles de nuevos pedidos están aumentando a un ritmo mucho más lento, después de un sólido crecimiento en ambas áreas en los meses anteriores", explican desde Hamburg Commercial Bank.
En detalle, la producción aumentó solo marginalmente, mientras que el modesto aumento de los nuevos pedidos fue el más lento en cinco meses. Aunque se informó que la demanda se mantuvo positiva, algunas de las empresas encuestadas notaron un cierto grado de incertidumbre entre sus clientes.
Este hecho fue especialmente evidente en los mercados de exportación, ya que las ventas al exterior aumentaron solo marginalmente desde diciembre de 2024. Si bien algunos encuestados informaron de una demanda más fuerte del norte de África, hubo informes de menores ventas a los principales mercados europeos y latinoamericanos.
"Los pedidos de clientes del extranjero también se estancaron prácticamente en enero. Las empresas encuestadas atribuyen dicha paralización en parte a la debilidad en los principales países de la zona euro, como Alemania y Francia", afirman.
Debido a la reducción de la producción y a un incremento de la cartera de pedidos por completar, las empresas encuestadas redujeron sus compras y la contratación de empleo en enero. En ambos casos, los ritmos de expansión fueron los más débiles en cinco meses. Los encuestados vincularon en parte la cierta renuencia a contratar nuevo personal a la preocupación por los costes.
"Tras varios meses de fuerte crecimiento, el empleo en el sector manufacturero apenas varió en enero. Cuando se necesitó más personal, las empresas no se negaron a contratarlo, pero las presiones de los costes y los esfuerzos de reestructuración afectaron el crecimiento del empleo. No obstante, los pedidos pendientes han ido aumentando desde hace un año. Este hecho, combinado con un sentimiento empresarial positivo, crea un entorno estable para los empleados del sector manufacturero español", comentan.
Por su parte, los últimos datos mostraron que la inflación de los precios de los insumos aumentó notablemente en enero, hasta su nivel más alto desde julio de 2024. Las empresas comentaron que los insumos como el acero aumentaron de precio, mientras que el incremento de los costes del transporte se sumó a las cargas de los costes. Las empresas encuestadas mencionaron que los proveedores estuvieron dispuestos a aumentar sus precios a pesar de evidenciarse unos plazos más largos en la entrega de los insumos.
De hecho, las empresas lamentaron otro deterioro en el desempeño de los proveedores en enero, señalando que los retrasos en la producción, la escasez de existencias y los cuellos de botella en el transporte habían provocado demoras en la recepción de los insumos, lo que en algunos casos resultó en desafíos de producción para los fabricantes en enero y en la utilización de los inventarios de insumos existentes siempre que fue posible.
Frente al incremento de los costes de los insumos, las empresas optaron por aumentar fuertemente sus tarifas en enero, y por lo tanto se observó que los precios cobrados volvieron a aumentar después de cuatro meses de descenso.
"La evolución de los precios es motivo de preocupación. La inflación de los precios de los insumos se ha acelerado durante varios meses consecutivos. A pesar de ello, todavía nos encontramos lejos de los altos niveles de inflación de los insumos observados tras los cuellos de botella en las cadenas de suministros después de la pandemia y la invasión rusa en Ucrania. La inflación de los precios de los insumos está ahora cerca de su promedio a largo plazo. Por primera vez en varios meses, los precios de venta también han aumentado. La subida de los precios puede interpretarse como una repercusión del aumento de los costes de los insumos a los consumidores", señalan.
Por último, de cara a los próximos doce meses, las empresas, en general, esperan que la producción aumente con respecto a los niveles actuales. La confianza en general se mantuvo prácticamente igual que la máxima de siete meses registrada en diciembre de 2024. Los fabricantes consideran que la combinación de crecimiento orgánico, nuevas actividades comerciales e inversiones rentables son razones para pronosticar que la producción aumente.