La UE multa con 458 millones a 15 fabricantes de coches por un cártel de reciclaje
La Comisión Europea ha multado con 458 millones de euros a 15 grandes fabricantes de automóviles y a la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA) por participar en un cártel sobre el reciclaje de vehículos al final de su vida útil.

Esto es, un coche que ya no es apto para su uso, ya sea por antigüedad, desgaste o daños, por lo que se desmontan y procesan para su reciclaje, recuperación y eliminación. El objetivo es minimizar los residuos y recuperar materiales valiosos como metal, plástico y vidrio.
A este respecto, la investigación de la Comisión ha revelado que, durante más de 15 años, 16 grandes fabricantes de automóviles (incluido Mercedes, que no ha sido multado por dar a conocer el cártel a la Comisión en el marco del programa de clemencia) y la ACEA celebraron acuerdos anticompetitivos y participaron en prácticas concertadas relacionadas con el reciclaje de vehículos fuera de circulación.
En particular, la Comisión ha constatado que las partes actuaron en connivencia en dos aspectos. En primer lugar, acordaron no pagar a los desguazadores de vehículos por el procesamiento de VFU. "En particular, acordaron considerar el reciclaje de VFU un negocio suficientemente rentable y, por lo tanto, no remunerar a los desguazadores por sus servicios (la denominada estrategia de Coste de Tratamiento Cero)".
Las empresas también compartieron información comercial sensible sobre sus acuerdos individuales con los desguazadores de vehículos y coordinaron su comportamiento con ellos.
Por otro lado, acordaron no promocionar la cantidad de un VFU que se puede reciclar, recuperar y reutilizar, ni la cantidad de material reciclado que se utiliza en los vehículos nuevos. "Su objetivo era evitar que los consumidores consideraran la información sobre reciclaje al elegir un vehículo, lo que podría reducir la presión sobre las empresas para que excedan los requisitos legales", han explicado desde Bruselas.
Según la Directiva 2000/53/CE sobre vehículos fuera de uso, el último propietario de un vehículo debe poder deshacerse de él gratuitamente a través de un desguazador y, en caso necesario, los fabricantes de vehículos están obligados a asumir los costes. Además, se exige a los consumidores estar informados sobre el rendimiento del reciclaje de los vehículos nuevos.
En este sentido, la investigación ha descubierto que ACEA era el facilitador del cártel, habiendo organizado numerosas reuniones y contactos entre los fabricantes de automóviles involucrados en él.
Así, las multas se han establecido con base en las Directrices de la Comisión sobre multas de 2006 y teniendo en cuenta diversos elementos, como el número de vehículos afectados por la infracción, su naturaleza, su alcance geográfico y su duración.
Es más, la Comisión ha tenido en consideración la menor participación de Honda, Mazda, Mitsubishi y Suzuki en la infracción. Asimismo, ha concedido una reducción a Renault, ya que las pruebas han demostrado que la compañía había solicitado explícitamente una exención del acuerdo de no anunciar el uso de material reciclado en vehículos nuevos.
Además, cuatro empresas han cooperado con la Comisión en el marco del programa de clemencia: Mercedes- Benz, que ha obtenido inmunidad total por revelar el cártel, evitando una multa de alrededor de 35 millones de euros; mientras que Stellantis (incluida Opel), Mitsubishi y Ford se han beneficiado de una reducción de la multa por su cooperación con la Comisión. La cuantía de la reducción concedida depende del momento de su cooperación, así como de las pruebas aportadas para demostrar la existencia del cártel. "Las tres empresas recibieron la reducción máxima prevista en la Comunicación sobre clemencia en caso de múltiples solicitudes de clemencia".
La Comisión también ha aplicado una reducción del 10% a las multas a todas las partes al reconocer su participación en el cártel y su responsabilidad. "La multa impuesta a la ACEA, por su función de facilitación, se fija en una suma global. Esta multa tiene en cuenta que todos los fabricantes de automóviles miembros de la ACEA han sido multados individualmente".
"Hoy hemos tomado medidas enérgicas contra las empresas que se confabularon para impedir la competencia en el reciclaje. Estos fabricantes de automóviles se coordinaron durante más de 15 años para evitar pagar por los servicios de reciclaje, acordando no competir entre sí en la publicidad sobre el grado de reciclaje de sus vehículos y guardar silencio sobre los materiales reciclados utilizados en sus nuevos vehículos. No toleraremos ningún tipo de cártel, incluidos aquellos que suprimen la concienciación de los consumidores y la demanda de productos más respetuosos con el medio ambiente", ha afirmado Teresa Ribera, vicepresidenta ejecutiva para la Transición Limpia, Justa y Competitiva.
"El reciclaje de alta calidad en sectores clave como la automoción será fundamental para alcanzar nuestros objetivos de economía circular, no solo para reducir los residuos y las emisiones, sino también para reducir las dependencias, disminuir los costes de producción y crear un modelo industrial más sostenible y competitivo en Europa", ha concluido.