Botín reitera que el negocio británico de Banco Santander "no está en venta"
La presidenta de Banco Santander, Ana Botín, ha asegurado que la filial británica de la entidad "no está en venta" y ha reiterado que el Reino Unido es un "mercado clave" para la entidad española.
"El Reino Unido no está en venta. Amamos el Reino Unido y seguirá siendo un mercado clave. Revisamos nuestra estrategia cada año. El Reino Unido es rentable, nos proporciona diversificación porque tiene una moneda diferente, su balance de riesgo es bajo y estoy muy satisfecha con el progreso que está logrando", ha destacado Botín en una entrevista concedida a The Sunday Times.
Los temores sobre las intenciones de Santander en el Reino Unido surgieron hace una semana, cuando el Financial Times informó que se estaba llevando a cabo una revisión del negocio. La especulación se intensificó la semana pasada cuando William Vereker, el exbanquero de inversión que preside las operaciones en el Reino Unido, anunció su intención de dejar el cargo este año, después de un período más corto de lo esperado de cinco años.
El debate sobre el negocio en el Reino Unido también ha puesto el foco en su gestión desde 2014 y en su lucha por revitalizar el precio de las acciones, que ha caído un 30% desde entonces. Algunos consideran que la entidad es un objetivo atractivo para la intervención de un inversor activista.
En este mismo artículo, The Sunday Times recoge la opinión de varios expertos a este respecto, los cuales creen que cualquier subida podría producirse tras la venta de negocios de "menor escala" donde "no se cubre el coste de capital". "Reino Unido es uno de esos mercados y es un tema que suele aparecer entre los inversores", explica Antonio Reale, analista de Bank of America.
Según este experto, el problema de Santander en el Reino Unido es que, aunque es el quinto banco más grande, resulta difícil, e incluso algunos dirían que imposible, romper el dominio de los "cuatro grandes": Lloyds Banking Group, Barclays, NatWest y HSBC. Si bien algunos clientes británicos han cambiado a rivales más pequeños como Santander, la mayoría aún mantiene sus cuentas corrientes en entidades tradicionales y consolidadas. Sin el dinero de esas cuentas corrientes, Santander debe recurrir a los mercados financieros para obtener efectivo y prestarlo a sus clientes en hipotecas y otros préstamos.
Por su parte, Benjamin Toms, analista de RBC, señala a la publicación británica que Santander tiene dos opciones: desprenderse de su negocio minorista en el Reino Unido o realizar una adquisición para diversificarlo y expandirlo. Se rumorea que Barclays podría haberse acercado a Santander o que una entidad de crédito hipotecario estaría interesada en esta filial de Santander.
Asimismo, según informa The Sunday Times, también se especula con la posibilidad de que Santander puje por Barclays para fortalecer su presencia en EEUU. Sin embargo, Ana Botín ha descartado ambas posibilidades. "Nos gustaría crecer, y hay distintas maneras de lograrlo", ha afirmado.