OHL se presenta a su decisiva junta de bonistas dando bandazos en bolsa
OHL celebrará por fin este viernes su junta de bonistas para aprobar la reestructuración de su deuda. La constructora llega a esta cita clave dando bandazos en bolsa, con sus acciones repuntando un 16% el martes y cediendo un 3,7% el miércoles (llegó a caer más de un 5%). En cualquier caso, estos últimos números rojos no significan que el mercado tema un fracaso en el acuerdo con los acreedores.
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Como explica el analista de XTB, Darío García, la compañía tiene poca liquidez, por lo que "una venta puede generar oscilaciones muy grandes en el precio". Este experto achaca el fuerte repunte del martes, que supuso la tercera mayor subida en lo que va de año, al bajo precio de sus títulos, "que puede generar un atractivo para los inversores de cara a la aprobación de la refinanciación de la deuda".
Pero, si el optimismo está más presente que nunca, ¿por qué solo una jornada después sufrió considerables caídas? García apunta que "pueden deberse a una recogida de beneficios anticipada porque los inversores alcanzaron su precio objetivo antes de tiempo". En ningún caso considera que deba atribuirse a que el acuerdo pueda llegar a tambalearse.
Esta opinión es compartida por el resto de analistas, ya que los bonistas son los principales interesados en que no conviertan su deuda en acciones. De hecho, su principal intención es mantener una renta fija para cobrar el cupón periódicamente. Aun así, García apunta que en el hipotético caso de no alcanzar un acuerdo, "veríamos una corrección muy similar a la subida que vimos el martes".
Sin embargo, pese al patente interés por ambas partes, alcanzar un acuerdo no ha sido fácil y la junta se ha tenido que aplazar hasta en tres ocasiones. Finalmente, parece que OHL conseguirá este viernes el respaldo de los bonistas para disponer del crédito de 140 millones de euros que logró con el aval del Instituto de Crédito Oficial (ICO), aunque cualquier disposición superior a 35 millones dependerá de la aprobación de estos.
También se acordará la reestructuración de las dos emisiones de bonos que todavía tiene vigentes, por un importe conjunto de 593 millones, para emprender la reestructuración del balance de la constructora. Este es el apartado que desde la compañía consideran que garantizará la viabilidad y el crecimiento a futuro.
LOS AMODIO PRETENDEN ALCANZAR LOS 4.000 MILLONES DE FACTURACIÓN
De esta manera, los Amodio, que recientemente se hicieron con el poder de la constructora, podrán empezar a acometer su ambicioso plan de crecimiento con el que pretenden aumentar en un 35% interanual las ventas del ejercicio 2020, hasta los 4.000 millones de facturación.
Desde que desembarcaron en OHL en su carta de presentación, los hermanos mexicanos se mostraron convencidos de poder devolverle la viabilidad a la compañía en el corto plazo, además de reactivar su capacidad financiera y su prestigio empresarial.
De momento, en el primer semestre del año, ha comunicado unas pérdidas de 38,5 millones frente a los números rojos de 15 millones que registró en el mismo periodo del 2019, debido a los efectos de la pandemia del Covid-19. En cuanto a las ventas, alcanzó unos ingresos de 1.350,3 millones, por lo que tendría que debería incrementarlos en un 33% durante lo que resta de año para alcanzar el objetivo fijado por los hermanos Amodio.