¿Ha tocado suelo el euríbor? Cierra enero subiendo al 2,525%, pero las hipotecas seguirán abaratándose
Se acabó la racha de nueve caídas mensuales consecutivas para el euríbor, que cierra enero al alza, situándose en el 2,525%. ¿Supone esto que el índice hipotecario ha tocado suelo? En cualquier caso, los hipotecados no tienen motivos para preocuparse: sus préstamos seguirán bajando por el momento.
El euríbor cerró 2024 en el 2,435%, su nivel más bajo desde septiembre de 2022 y registrando su mayor caída en un mes de diciembre desde 2012.
Como recuerdan desde Bankinter, el euríbor entró en negativo en 2016 y se mantuvo en valores bajo cero hasta que entró en positivo en abril de 2022. En octubre de 2023, alcanzó su último máximo de los últimos 14 años (desde noviembre de 2008, que cerró en 4,35%).
Durante el pasado año, el índice se fue comportando de la siguiente manera, situándose en el 3,609% en enero, el 3,671% en febrero, el 3,718% en marzo, el 3,703% en abril, el 3,680% en mayo, el 3,650% en junio, el 3,526% en julio, el 3,166% en agosto, el 2,936% en septiembre, el 2,691% en octubre, el 2,506% en noviembre y el 2,436% de diciembre.
Pero ahora, en el arranque de 2025, el indicador al que están referenciadas la mayoría de hipotecas se gira. ¿A qué se debe? Según explica el especialista hipotecario de HelpMyCash, Miquel Riera, es probable que los actores del mundo financiero hayan visto enfriadas sus expectativas sobre los próximos recortes de tipos del Banco Central Europeo (BCE).
Antes de terminar el año, el consenso generalizado era que el organismo iba a recortar repetidamente sus tipos de interés en 2025, hasta situarlos en torno al 2% al terminar el año. En consecuencia, el euríbor, que representa el interés medio al que los bancos europeos se prestan dinero entre sí y se anticipa a los movimientos del BCE, terminó el año con una importante bajada.
El escenario actual, sin embargo, invita menos al optimismo, con la inflación de la eurozona repuntando ligeramente, la debilidad del crecimiento económico en la región y las medidas proteccionistas del presidente de EEUU, Donald Trump. "Factores que podrían forzar al BCE a moderar su actual política de recortes".
En su encuentro de enero, el BCE cumplió con el guion y bajó los tipos de interés en 25 puntos básicos, como se esperaba. Y previsión es que mantenga esta tendencia, al menos en su próximo encuentro de marzo, "dado que no se esperan repuntes de inflación y las economías de ciertos países del continente (como Francia o Alemania) necesitan un empujón", añade.
"A pesar de las continuas declaraciones de Christine Lagarde de actuar conforme a los datos, pensamos en un escenario en el que seguirán bajando de manera paulatina hasta situarse en el 2% en junio de 2025. Este nivel podría servir como punto de referencia para evaluar los efectos de la política económica de Trump y su impacto en los mercados globales", afirma Pablo Vega, experto en producto financiero de Roams, que considera que estas reducciones en el tipo de interés por parte del BCE tendrán como efecto que los bancos vayan mejorando su ofertas de hipotecas de manera paulatina.
En consecuencia, desde el comparador financiero creen que el euríbor no tardará mucho en volver a bajar, a no ser que se produzca algún imprevisto. "Es probable que el euríbor cierre el primer semestre de 2025 con un valor de entre el 2% y el 2,25%", lo que significa que las hipotecas a tipo variable continuarán abaratándose.
De hecho, el cierre de enero aún se sitúa muy por debajo de los registros de hace un semestre (3,526%) y de hace un año (3,609%). "Los que tengan una hipoteca variable pueden estar tranquilos, porque sus cuotas bajarán si les toca una revisión en las próximas semanas", destacan.
Eso sí, la bajada de las cuotas será mayor o menor en función de las condiciones de la hipoteca que vaya a revisarse: su importe y plazo pendientes y su interés.
El interés de estos productos no se actualiza mensualmente, sino de manera semestral o anual, dependiendo de lo indicado en el contrato. En la fecha de revisión, el banco usa el último valor publicado del índice para recalcular el tipo aplicado, con lo que, si es inferior al de la anterior actualización, las cuotas bajarán, mientras que si es superior, las mensualidades se encarecerán.
"De cara al medio-largo plazo, y a falta de saber cómo se materializan las medidas arancelarias del gabinete Trump en las próximas semanas", desde Kelisto creen que "lo lógico sería ver nuevos descensos en la tasa de depósito del BCE, al menos durante la primera mitad del ejercicio. Eso llevaría al euríbor a situarse en el entorno del 2%-2,25% a finales de 2025", dice su portavoz, Estefanía González.