El bitcoin y las criptos se recuperan tras uno de los peores momentos de su historia

Por su parte, el ethereum (ETH) retrocedió un 16% y perdió los 3.700 dólares en ese mismo período. Ahora, la mayor altcoin del mercado cotiza alrededor de los 4.200 dólares tras repuntar más de un 9% en el último día. Otros tokens como Binance coin (BNB), XRP, solana (SOL), dogecoin (DOGE) o cardano (ADA) suben con mucha fuerza, algunos incluso registrando alzas de doble dígito.

Como ya es habitual, ante cada episodio de volatilidad extrema en los mercados hay que mirar hacia la Casa Blanca. El pasado viernes, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a encender las alarmas de todo el mundo al amenazar a China con imponer aranceles del 100% a sus productos, así como de rechazar una reunión con su homólogo chino, Xi Jinping, tal y como estaba previsto.

Las declaraciones de Trump llegaban apenas un día después de que China decidiese endurecer de nuevo los controles sobre la exportación de tierras raras, uno de los recursos más apreciados por Estados Unidos.

El resultado no se hizo esperar. Las violentas caídas de los precios llevaron a algunos analistas a comparar los desplomes de las criptomonedas con el colapso del mercado en 2020, cuando comenzaron los confinamientos por la pandemia de Covid-19.

La venta masiva generalizada condujo a más de 19.000 millones de dólares en liquidaciones en un período de 24 horas, convirtiéndose en el mayor evento de liquidación diaria en la historia de las criptomonedas en términos de valor en dólares. Según CoinGlass, el "total real" de liquidaciones es "probablemente mucho mayor", ya que Binance, el mayor exchange del mundo, no reporta sus cifras tan rápido como otras plataformas.

Jonathan Man, estratega de Bitwise, apunta hacia el apalancamiento y la posición del mercado como los factores claves que explican estas caídas. En este sentido, el apalancamiento estaba extendido en los tokens menos líquidos, por lo que cuando la liquidez desapareció, la caída fue severa, aunque permitió una reconfiguración más rápida del mercado. Además, el staking también tuvo un papel clave, ya que consiguió amortiguar la caída, ya que buena parte del suministro de ETH (alrededor de un 30%) estaba bloqueado y mitigó lo que podría haber sido un colapso total de la liquidez.

"Este movimiento violento no solo sorprendió a los inversionistas, sino que también ilustró cómo bitcoin, un activo cada vez más institucionalizado, todavía conserva el comportamiento reflexivo de un instrumento de libre mercado. Actúa como un espejo instantáneo del sentimiento de riesgo global, donde cada cambio en las expectativas de política económica se refleja de forma directa y sin intermediación", explica Linh Tran, analista de mercados de XS.

Con todo, la calma parece haber vuelto al mercado después de que el propio Trump apagase el fuego que él mismo había iniciado. Después de que Pekín le recordase al presidente estadounidense que "amenazar con aranceles elevados no es la estrategia correcta", Trump señaló en su red social, Truth Social, que "todo estará bien" con China. "El respetado presidente Xi acaba de pasar un mal momento. No quiere una depresión para su país, y yo tampoco. ¡Estados Unidos quiere ayudar a China, no perjudicarla! ", escribió.

"La publicación del presidente Trump insinuando 'progresos' con China actuó como un doble impulso para los operadores que habían pasado el fin de semana descontando el Armagedón en las cotizaciones. Los futuros saltaron, el oro se enfrió, el petróleo se fortaleció y las criptomonedas —siempre ansiosas por adelantarse a la diplomacia— se dispararon como si los aranceles ya hubieran sido eliminados y sustituidos por apretones de manos digitales", escribe Stephen Innes, gestor de SPI Asset Management. No obstante, recuerda esto experto, conviene tomar esto como lo que es: un "teatro de negociación", o "ajedrez geopolítico".

Pese a ello, los analistas piden cierta calma. En palabras de Tran, "no interpretaría la reciente volatilidad como una señal negativa". "Simplemente demuestra que BTC sigue siendo muy sensible a los shocks políticos y macroeconómicos, como es natural para un activo de riesgo. Un mercado que puede caer casi un 17% en cuestión de horas y recuperar el equilibrio al día siguiente no está construido sobre bases de capital débiles", sentencia este experto, en referencia a los fuertes flujos de capital institucional que hay en juego y a la perspectiva positiva a medio plazo.