Los analistas restan importancia al nuevo varapalo sufrido por Iberdrola en EEUU
Las acciones de Iberdrola apenas reaccionan al último varapalo sufrido en Estados Unidos. Y es que la Administración Trump anunció ayer la suspensión de los arrendamientos de cinco proyectos eólicos marinos ya en construcción alegando riesgos para la seguridad nacional, entre los que se encuentra Vineyard Wind, desarrollado por la cotizada española a través de su filial Avangrid.
Este parque está siendo desarrollado frente a las costas de Massachusetts, cuenta con una capacidad instalada de 806 MW y una inversión de más de 2.700 millones de euros ya iniciada. Es, además, el mayor parque eólico de Iberdrola en Estados Unidos.
Vineyard Wind 1 está participado en un 50% por Iberdrola a través de Avangrid y el restante 50% está en manos del grupo inversor danés Copenhagen Infrastructure Partners (CIP). El proyecto inició su construcción en 2021 y comenzó a suministrar electricidad a comienzos de 2024.
"De los 62 aerogeneradores que componen el parque de Vineyard Wind 1, 44 ya están construidos y generan electricidad y otros seis se encuentran actualmente en construcción. Queda por confirmar si la suspensión ordenada por el ejecutivo norteamericano afectaría al conjunto del proyecto o solo a los 12 aerogeneradores que quedan por construir", explica Aránzazu Bueno, analista de Bankinter, en un informe publicado este martes.
La medida también afecta a otros proyectos como Coastal Virginia Offshore Wind, desarrollado por Dominion Energy; Empire Wind, frente a Nueva York, desarrollado por Equinor; Sunrise Wind y Revolution Wind, frente a Nueva York y Rhode Island, a cargo de Orsted. Esta última sí registra caídas más abultadas que la firma del Ibex 35.
Bankinter, que mantiene la recomendación de compra sobre Iberdrola y un precio objetivo de 19,1 euros, destaca que esta noticia es de marcado carácter negativo, aunque también de alcance "limitado". Por su parte, los analistas de Sabadell también recomiendan sobreponderar estas acciones, aunque dejan el precio objetivo bajo revisión tras esta noticia.
"Hasta ahora, las amenazas de Trump contra la eólica marina de Iberdrola se centraban en proyectos donde el grupo todavía no había comenzado la construcción. Es el caso de los parques New England Wind 1 y 2, a los que Trump retiró la autorización para construir el pasado mes de septiembre. La inversión que Iberdrola había realizado en estos parques era mínima y no había provisionado nada por las amenazas de paralización", recuerda Bueno.
Pero el caso de Vineyard Wind 1 es distinto. Y es que "gran parte" de la inversión de 2.700 millones de euros está comprometida. Así, destaca Bueno, queda por confirmar si el bloqueo afecta al total de los 62 generadores del proyecto o tan solo a los 12 generadores que todavía quedan por construir.
"En el peor de los escenarios, el impacto sería limitado para Iberdrola. Por un lado, el 50% de la inversión en Vineyard Wind 1 supone 1.350 millones de euros, lo que representa el 1,1% de su actual capitalización bursátil. Además, la eólica marina en EEUU no es una prioridad en las inversiones a futuro de grupo. La prioridad está en el crecimiento en redes y así queda reflejado en su Plan Estratégico", explica. Iberdrola contempla que la base de activos regulados en redes pase de 49.000 millones de euros en 2024 hasta 70.000 millones y con retornos "muy atractivos" (ROE medio de 9,5%).
