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04/04/2025 12:55:31

S&P huye del catastrofismo: no ve una recesión en EEUU en los próximos 12 meses

La agencia de calificación S&P Global Ratings opina que los aranceles recíprocos de Donald Trump no han aumentado significativamente el riesgo de recesión en Estados Unidos en el próximo año.

S&P huye del catastrofismo: no ve una recesión en EEUU en los próximos 12 meses

"¿Probabilidad de recesión? Aún no vemos una recesión en los próximos doce meses, tal y como la entiende la Oficina Nacional de Investigación Económica (en términos de profundidad, duración y dispersión amplia de debilidad, no solo dos trimestres consecutivos de crecimiento negativo)", explican estos expertos.

No obstante, la firma neoyorquina reconoce que probabilidad de que la primera economía del mundo entre una recesión en ese mismo período "probablemente haya aumentado" a un 30%-35% desde el 25% en marzo.

Según S&P, el impacto en el PIB estadounidense depende de las represalias de los socios comerciales y de cómo se utilicen los ingresos por tarifas. Y es que los aranceles son un impuesto regresivo: afectarán más a los hogares de ingresos bajos como porcentaje de su gasto.

Así, la erosión del poder adquisitivo, peores condiciones en los mercados bursátiles y una mayor incertidumbre en la inversión probablemente "debilitarán aún más" el crecimiento. Además, lo que se haga con las tarifas recaudadas es "igualmente importante" para la trayectoria del PIB "más allá del choque inicial".

"El impacto en el PIB dependerá de si los ingresos se reciclan en forma de recortes fiscales a los consumidores o en alguna otra forma de retribución. Aún así, bajo un escenario de tal reciclaje y una represalia relativamente moderada, nuestra impresión es que el crecimiento real trimestral del PIB, en comparación interanual, probablemente tocará fondo con una caída de entre tres y cuatro décimas de punto porcentual en relación con nuestra previsión de marzo del 1,6% para los próximos 12 meses", apuntan.

Sobre una base "estática", S&P estima que los ingresos por tarifas ascenderán a entre 700.000 millones y 800.000 millones de dólares en el primer año, o entre el 2,3% y el 2,7% del PIB, pero ve más probable que sean "mucho menores", ya que las importaciones disminuirán y los ingresos no arancelarios también se verán afectados por un crecimiento más débil.

De igual modo, la firma estadounidense cree que el impacto en la inflación a corto plazo será "significativo", probablemente más cerca del 4% en el cuarto trimestre que en sus anteriores previsiones, que la situaban alrededor del 3%.

"Dado que el 11% del gasto del consumidor está representado por bienes importados, el costo adicional de importación añadiría entre 0.7% y 1% al nivel del índice de precios al consumidor (IPC) en comparación con nuestra previsión anterior (suponiendo que el 50%-75% se traslade a los consumidores). Suponiendo que no haya grandes efectos secundarios, la inflación debería regresar al objetivo del 2% para mediados de 2026", explican estos analistas.

Teniendo esto en cuenta, S&P ve probable que la Reserva Federal (Fed) mantenga su tasa de política estable durante la mayor parte del año, aunque algunos indicadores sugieran aumentos de tasas. "Nuestra impresión es que la Fed optaría por mantenerse estable, dadas las perspectivas negativas para el empleo, incluso cuando la inflación suba", señalan.

"Por ahora, continuamos asumiendo un recorte de tasas de 25 puntos básicos a finales de año, ya que el crecimiento del empleo se debilita lo suficiente como para que la Reserva Federal pase por alto la inflación impulsada por las tarifas. En un escenario negativo donde el gasto del consumidor y la demanda laboral caigan drásticamente, esperaríamos que la Reserva Federal recorte las tasas agresivamente", sentencia S&P.

Recientemente, los mercados monetarios elevaron al 50% la probabilidad de que la Reserva Federal lleve a cabo cuatro reducciones de tasas de un cuarto de punto porcentual este año, un escenario que ni siquiera se contemplaba antes de que Trump diese a conocer los aranceles.

RESTO DEL MUNDO

Asimismo, S&P destaca que el efecto de las tarifas en el resto de economías será más profundo en alcance y tamaño que lo anteriormente previsto. Por ello, la agencia pronostica menores expectativas de crecimiento del PIB y tasas de política monetaria en su mayoría, aunque estas pueden variar significativamente entre economías.

En cuanto a las grandes economías desarrolladas, como la eurozona y China, la agencia de calificación cree que "probablemente experimentarán ajustes más pequeños" en sus tasas de crecimiento, que se limitarán a "alrededor de un cuarto de punto porcentual por año". "Europa aún verá un impulso debido al mayor gasto en infraestructura y defensa a partir de 2026", explican.

En segundo lugar, las economías "más abiertas que dependen del comercio para crecer" probablemente experimentarán ajustes más grandes en sus tasas de crecimiento, especialmente si comercian en gran medida con EEUU. Este es el caso, por ejemplo, de Irlanda y Suiza en Europa y las economías "tigre" del sudeste de Asia-Pacífico: Hong Kong, Singapur, Taiwán y Corea del Sur.

A su vez, Canadá se ha salvado un poco de la quema, ya que los aranceles impuestos son ligeramente menores de lo que se temía. Aun así, apunta S&P, las tarifas sobre automóviles, acero y aluminio, la incertidumbre continua sobre las políticas arancelarias y el crecimiento más débil de EEUU mantendrán el crecimiento del país norteamericao "muy por debajo de su potencial en 2025".

"La cláusula de escape —si Trump decide que Canadá ha apaciguado las preocupaciones sobre el tráfico fronterizo y de drogas— sería una tasa de tarifa promedio ponderada inferior al 10%", apunta la firma.

En cuanto a América Latina, la región está sujeta a tasas arancelarias recíprocas "relativamente más bajas" que las anunciadas para otras economías. Para las economías de la región, señala la agencia, el principal impacto sobre el PIB provendrá del impacto de una demanda global más débil.

Todo esto, explica S&P, provocará cambios en las políticas monetarias de los distintos bancos centrales, que también serán muy heterogéneas. Por un lado, los bancos centrales en economías más grandes tendrán más margen para reducir las tasas en respuesta a un crecimiento más lento. Por ejemplo, prevén un recorte adicional por parte del Banco Central Europeo (BCE) este año.

Por otro, los bancos centrales en economías más pequeñas, más abiertas y dependientes del dólar estarán "más limitados por lo que haga la Reserva Federal (Fed)". "Para aquellos bancos centrales en economías vulnerables con expectativas de inflación menos ancladas, las tasas podrían tener que aumentar para proteger el balance de pagos", sentencia S&P.

Sin embargo, no hay que excluir de la ecuación cualquier posible represalia de los países. S&P pronostica que estas contramedidas estarán dirigidas a industrias de EEUU percibidas como "vulnerables". También esperan, en algunos casos, medidas no arancelarias así como iniciativas que afecten tanto los flujos de servicios como de bienes. "Estas posibles contramedidas ejercerían más presiones a la baja sobre el crecimiento", concluyen estos expertos.

En este sentido, la Unión Europea (UE) ha anunciado que aplicará contramedidas si las negociaciones con Washington fallan. A su vez, el primer ministro de Canadá, Mark Carney, ha prometido que Ottawa "se alzará" frente a las tarifas de Trump. Este viernes, China ha anunciado que impondrá un arancel del 34% a todos los bienes de Estados Unidos.


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