Repsol no consigue su propósito
A mediados del pasado mes de febrero vimos un soplo de aire fresco en Repsol, que consiguió subirse por encima de la media de 200 sesiones.

Parecía que el propósito de la petrolera era iniciar una recuperación. La sana toma de beneficios se extendió más de lo esperado. No logró sujetarse en la media de 200 sesiones y remató la faena al dejarse un hueco bajista que es una muestra de la fortaleza actual de las ventas. Vuelven las malas sensaciones técnicas a la compañía del Ibex. A corto plazo podríamos ver un ataque al soporte de los 11,23 euros. Si al final los pierde sería una mala noticia que podría acabar por arrastrar a su serie de precios hasta los mínimos del pasado año que dibujara en los 11,13 euros. No apreciaremos una señal de fortaleza hasta que no logre anular el hueco bajista que se dejara en los 12,16 euros.
