Las bolsas dudan: "El espectro de una guerra comercial en toda regla vuelve a asomar"
Los aranceles que está implementando el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, están infundiendo temor en las principales bolsas mundiales, que tienden a recibir con caídas cada tasa que el mandatario anuncia. Sin embargo, los analistas creen que lo peor puede estar todavía por llegar, y no descartan que se produzca una "guerra comercial en toda regla".

Stephen Innes, gestor de SPI Asset Management, considera que "el espectro de una guerra comercial en toda regla vuelve a asomar, amenazando con asfixiar el crecimiento económico mundial justo cuando los inversores comenzaban a recuperar la confianza".
Este lunes, Wall Street reaccionó con fuertes caídas a la confirmación de los aranceles del 25% a México y Canadá, lo que para Innes se debe a que "los inversores presionaron el botón del pánico", mientras que "el mercado de bonos decidió seguir adelante, lanzando otra siniestra advertencia sobre la salud de la economía estadounidense".
"La caída de los rendimientos de los bonos suele actuar como una red de seguridad para las acciones, pero sólo cuando las expectativas de una política monetaria más flexible alimentan la caída. Esta vez no. Esta última medida gritó preocupaciones sobre el crecimiento de la aversión al riesgo, no un giro de la Reserva Federal, y ahí es donde las cosas se pusieron feas. La última diatriba comercial de Trump no fue sólo ruido del mercado sino el acelerador", asegura.
Según su criterio, "con los inversores ya nerviosos, lo último que necesitaba Wall Street era otra ronda de vientos económicos en contra", y es que "el apetito por el riesgo se ha visto limitado y se está endureciendo".
Además, este analista cree que ningún territorio puede sentirse a salvo de las políticas de EEUU, ya que "la bola demoledora de aranceles de Trump no sólo está golpeando a Canadá, México y China, sino que ahora se dirige directamente hacia Europa".
Ante este contexto, apunta que "las alarmas están sonando a medida que la última andanada arancelaria de Donald Trump se considera otro paso deliberado hacia una guerra comercial global en toda regla". Y mientras las amenazas crecen, "China no se queda de brazos cruzados".
"El Global Times de Beijing, respaldado por el Partido Comunista, no perdió tiempo en responder, informando que los funcionarios chinos están sopesando una nueva ronda de medidas de represalia, esta vez dirigidas a la agricultura y los productos alimenticios estadounidenses. Según el informe, la respuesta de China incluirá una combinación de aranceles y barreras no arancelarias, lo que aumentará la presión sobre los exportadores estadounidenses y agregará otra capa de incertidumbre a una economía global ya frágil", detalla.