DeepSeek en el ojo del huracán: Microsoft investiga si robó datos de OpenAI
DeepSeek está en el punto de mira del mercado. La irrupción de la startup china de inteligencia arfiticial (IA) ha causado un terremoto en el sector tecnológico tras haber construido su modelo de código abierto R1 con chips más baratos y menos avanzados, lo que ha puesto en duda el elevado gasto que las big tech estadounidenses en esta tecnología. Pero, si esto es cierto ¿cómo lo ha logrado? Microsoft ha abierto una investigación para descubrir si ha obtenido datos de manera no autorizada de OpenAI, dueña de ChatGPT.
Así lo revela Bloomberg, quien explica que investigadores de seguridad de Microsoft observaron en otoño cómo individuos que creen pueden estar relacionados con DeepSeek filtraron una gran cantidad de datos utilizando la interfaz de programación de aplicaciones (API) de la empresa liderada por Sam Altman.
En este sentido, cabe destacar que los desarrolladores de software pueden pagar una licencia para utilizar la API e integrar los modelos de inteligencia artificial patentados de OpenAI en sus propias aplicaciones.
En base a la información del citado medio, que alude a personas familiarizadas con el asunto, Microsoft, socio tecnológico de OpenAI y su mayor inversor, notificó a la compañía sobre esta actividad, que podría violar los términos de servicio de la creadora de ChatGPT. "También podría indicar que el grupo actuó para eliminar las restricciones de OpenAI sobre la cantidad de datos que podían obtener", indican las fuentes a Bloomberg.
Para David Sacks, el zar de la IA del presidente de EEUU, Donald Trump, hay una "evidencia sustancial" de que DeepSeek se basó en los resultados de los modelos de OpenAI para desarrollar su propia tecnología. En una entrevista con Fox News, Sacks describió una técnica llamada destilación mediante la cual un modelo de IA utiliza los resultados de otro con fines de entrenamiento para desarrollar capacidades similares.
"Hay evidencia sustancial de que lo que hizo DeepSeek aquí fue extraer conocimiento de los modelos de OpenAI y no creo que OpenAI esté muy contento con esto", afirmó Sacks.
Por su parte, OpenAI, y en respuesta a estos comentarios, ha dicho a Bloomberg que "sabemos que las empresas con sede en la República Popular China (y otras) están constantemente tratando de destilar los modelos de las principales empresas de inteligencia artificial de Estados Unidos".
"Como principal constructor de inteligencia artificial, tomamos contramedidas para proteger nuestra propiedad intelectual, incluido un proceso cuidadoso para determinar qué capacidades de vanguardia incluir en los modelos publicados, y creemos que, a medida que avanzamos, es de vital importancia que trabajemos en estrecha colaboración con el gobierno de Estados Unidos para proteger mejor los modelos más capaces de los esfuerzos de los adversarios y competidores por apoderarse de la tecnología estadounidense", ha concluido la compañía.