Barclays reitera su apuesta por Redeia tras vender Hispasat: "Vemos catalizadores positivos"
"Vemos catalizadores potencialmente positivos para Redeia durante el primer semestre de 2025". Es la opinión de los analistas de Barclays, quienes prevén un ligero incremento en el beneficio por acción (BPA) de la compañía tras la venta de su participación del 89,68% en Hispasat a Indra.
"La compañía de satélites apenas contribuía a los resultados del grupo", matizan los analistas. Con todo, el importe de la operación, que asciende a 725 millones de euros, se sitúa por debajo de la valoración de Barclays del negocio de satélites (1.100 millones), lo que les ha llevado a recortar levemente el precio objetivo de Redeia hasta los 20 euros por acción desde los 20,50 euros por título previos.
A pesar de ello, la nueva valoración supone un potencial alcista del 22,8% frente al actual precio de cotización de la empresa, por lo que reiteran su recomendación de sobreponderar el valor.
En medio de este escenario, los expertos de la entidad británica aumentan su previsión de BPA para 2025 en un 2%, "ya que Hispasat contribuyó muy poco a los beneficios netos, mientras que rebajamos nuestras estimaciones de coste financiero neto por la entrada de efectivo tras la venta". Además, "recortamos nuestra previsión de BPA para 2026 en un 1% para tener en cuenta pequeños ajustes derivados de la desconsolidación".
Con todo, en Barclays ponen el foco en los catalizadores positivos para Redeia. "Tras los recientes retrasos en el calendario de la revisión regulatoria de las actividades reguladas de energía española debido al nombramiento tardío del nuevo Ministro, ahora esperamos la primera propuesta de retornos permitidos en algún momento durante el primer trimestre".
En este sentido, no descartan la posibilidad de que se publique el borrador de la Planificación de Infraestructura antes de que se dé a conocer la propuesta. Si eso ocurriera, dicen que tendrían más visibilidad sobre el gasto de capital en transmisión de energía que se necesita para los próximos cinco años.
"Se espera que todo el proceso regulatorio finalice a fines de octubre de 2025 con la determinación final. También esperamos que la administración de Redeia actualice su estrategia en cualquier momento después de las vacaciones de verano", comentan.
Así, confían en que la próxima revisión regulatoria se traduzca en un aumento de las rentabilidades permitidas para cubrir el creciente coste del capital. "Lo consideramos necesario para incentivar la inversión en un nuevo ciclo de gasto de capital asequible, ya que el costo para los consumidores podría cubrirse con el acantilado de ingresos de 2024, y justificado, ya que Redeia debería apuntar a un diferencial de 100 puntos básicos sobre el WACC, en línea con sus pares", concluyen en Barclays.