Los analistas ponen en cuarentena a Enagás pero no dudan de su dividendo
Las recomendaciones de vender de Enagás están en máximos históricos. Un 76% de los analistas recogidos por FactSet aconseja la venta de los títulos de la gasística. Un porcentaje que ha crecido en los últimos días ante la amenaza de un posible tijeretazo regulatorio de la CNMC (Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia).
JP Morgan, RBC, Bankinter, Citi, Kepler, Banco Sabadell... son algunas de las entidades que han rebajado su recomendación de Enagás recientemente.
La cuarentena al valor es clara y las incertidumbres siguen pesando demasiado para pronunciarse respecto a su futuro cercano.
Desde Sabadell apuntan que "es la compañía más afectada porque vería como su retribución se ve rebajada un 21,8%, es decir, unos 223 millones de euros frente a los 40 millones que pronosticamos nosotros".
Esto dejaría al título "un 18% por debajo de su precio actual, por lo que a la espera de analizar con detalle las circulares (de la CNMC) situamos nuestro precio objetivo bajo revisión".
En Mirabaud también han puesto al valor bajo revisión y sus analistas explican a Bolsamanía que están redactando un nuevo informe sobre la empresa al ser la más afectada porque "la propuesta ha sido más drástica que en otros casos como Red Eléctrica". Con todo, adelanta que su postura se encontrará entre los expertos que recomiendan vender.
EL DIVIDENDO SIGUE ADELANTE
La retribución al accionista de Enagás es una de las más suculentas del Ibex. Con toda la que está cayendo, ¿Está el dividendo asegurado? Desde Mirabaud aseguran que "a corto plazo, sí", puesto que "ya establecieron su política para este año aunque habrá que ver cuando se apruebe la regulación definitiva de la CNMV".
Los expertos de Goldman Sachs también creen que el dividendo de Enagás está asegurado por el momento aunque el nuevo escenario para el gas en España "representa un riesgo considerable para la retribución al accionista a partir de 2023". El banco de inversiones va aún más lejos que el resto de analistas y cree que esto puede acabar teniendo un impacto negativo de hasta el 50% sobre el beneficio por acción (BPA) de la gasística.