Alemania, al borde de la recesión: peor julio de la industria en siete años
Alemania ha sufrido este miércoles otro duro golpe. La industria germana ha registrado su peor mes de julio en siete años, lo que sitúa la recesión a un paso. De hecho, la economía de la conocida como locomotora de Europa ya está sufriendo las consecuencias de la crisis que atraviesa el sector industrial.
El índice de los gestores de compra (PMI) que elabora la consultora Markit ha supuesto un nuevo golpe de gracia para Alemania, al mostrar una desaceleración mayor de lo previsto en la industria. En concreto, en julio se ha situado en los 43,1 enteros, frente a los 45,0 esperados y los 45,2 registrados el mes anterior. Se trata, por tanto, del peor dato registrado por el sector en un mes de julio desde 2012.
El único dato positivo, y que logra evitar la entrada en recesión de la primera economía de Europa, es el PMI del sector servicios, que ha mostrado una desaceleración menor de lo esperado, hasta los 55,4 puntos (se esperaba un 55,3). Sin embargo, cabe destacar que ha tocado su mínimo de dos meses, ya que venía del 55,8 registrado en junio.
Todos estos datos sugieren un deterioro de las perspectivas de crecimiento de la economía más grande del Viejo Continente, y es que un resultado por encima de 50 puntos indica un crecimiento, mientras que uno inferior, contracción, y si la cantidad final es inferior a 42 anticipa una contracción, que es la situación en la que se encuentra ahora mismo Alemania. Los sectores manufacturero y servicios, analizados en los mencionados PMI, representan en conjunto más de dos tercios del PIB germano.
De hecho, este martes el Fondo Monetario Internacional (FMI) revisaba a la baja su previsión de crecimiento de Alemania para este año, hasta el 0,7%, mientras que en 2020 estima que será del 1,7%, tres décimas más. Unas estimaciones que son mucho más optimistas que las del propio gobierno alemán, que espera un crecimiento del PIB del 0,5% este año y un repunte al 1,5% en 2020.
LA INDUSTRIA VA "DE MAL EN PEOR"
"La salud de la industria manufacturera alemana ha ido de mal en peor en julio", ha dicho Phil Smith, economista de la Markit, tras explicar que en el séptimo mes del año se ha acelerado la caída de los pedidos de exportación, de forma que ha sido la más pronunciada registrada en más de una década.
Parte de la culpa de lo ocurrido es del sector automovilístico. En concreto, otro de los economistas de la consultora, Chris Williamson, ha dicho que "la industria del automóvil es el sector empresarial que está más presionado" por las disputas comerciales, por el Brexit y también por la caída de la demanda extranjera de coches y de otros productos industriales, lo que ha provocado que sea uno de los sectores que más ha sufrido, recoge Reuters.
Las cifras de la encuesta y otros datos económicos dados a conocer recientemente en Alemania sugieren una ligera contracción del PIB tanto en el segundo como en el tercer trimestre, lo que en conjunto significaría que el país ha entrado en una recesión técnica. Aunque cabe destacar que el contagio de la crisis de la industria manufacturera a otros sectores de la economía sigue siendo limitado, ya que el sólido mercado laboral de Alemania y el sólido gasto de los hogares están amortiguando las perturbaciones externas. Habrá que esperar para ver si los peores pronósticos se cumplen.