Schnabel (BCE) saca las garras de halcón y pide más cautela al bajar los tipos de interés
El Banco Central Europeo (BCE) debería tener más cuidado a la hora de recortar los tipos de interés. Esa es la visión de Isabel Schnabel, miembro del Comité Ejecutivo del organismo, quien cree que bajar más las tasas oficiales podría no frenar lo suficiente la economía comunitaria y acabaría teniendo efectos contraproducentes en la inflación y en la economía del Viejo Continente.
"Yo advertiría contra ir demasiado lejos, es decir, hacia territorio acomodaticio", ha indicado Schnabel en una entrevista concedida a Bloomberg en la que adoptó un tono sorprendentemente duro (hawkish).
La funcionaria alemana ha señalado que el BCE pueden seguir flexibilizando la política monetaria, pero debe hacerlo de forma gradual para evitar llevarla por debajo de la tasa neutral. Según Schnabel, este nivel podría situarse entre el 2% y el 3%, sensiblemente por encima de lo que han sugerido miembros con una visión más laxa (dovish) como el portugués Mário Centeno o el griego Yannis Stournaras.
"Nos estamos acercando al territorio neutral", ha afirmado Schnabel, al tiempo que ha indicado que hay un margen limitado para seguir recortando los tipos de interés debido a la "enorme incertidumbre" actual. Según la economista germana, el descenso puede mantenerse "mientras los datos que vayan llegando confirmen nuestro escenario base" de una inflación estable en el 2%.
PREOCUPACIÓN POR EL CRECIMIENTO
Las declaraciones de Schnabel han provocado una reevaluación de las perspectivas de bajadas de tipos del BCE después de que los datos mostraran un proceso desinflacionario "bien encaminado", como reflejaron las actas de la última reunión del organismo.
Dicho documento recogió que hubo un amplio acuerdo en el Consejo de Gobierno sobre que la convergencia de la inflación hacia el objetivo de medio plazo del 2% estaba bien encaminada y que la configuración de los riesgos al alza y a la baja se había vuelto más equilibrada.
No obstante, Schnabel considera que debería adoptarse un enfoque más cauteloso. "Los mercados parecen asumir que necesitaremos movernos hacia un territorio acomodaticio. Desde la perspectiva actual, no creo que eso sea apropiado", ha afirmado la alemana, quien también optó por un "enfoque gradual" de cara al futuro. Dicho de otro modo: que prefiere que el BCE vaya bajando los tipos de interés en 25 puntos básicos (pb) en lugar de en 50 pb.
Y es que la alemana cree que las debilidades mostradas por la economía europea "son estructurales" y unos tipos de interés más bajos podrían tener poco o ningún efecto. En opinión de Schnabel, "los costes de pasar a una política monetaria expansiva podrían ser mayores que los beneficios".
"Utilizaríamos un valioso margen de maniobra que será necesario en el futuro cuando la economía se enfrente a shocks que la política monetaria pueda abordar de manera más eficaz. Si las empresas no invierten por razones que no tienen que ver con la política monetaria, bajar los tipos por debajo de la tasa neutral tampoco elevará la inversión. Necesitas políticas estructurales para conseguir eso", ha agregado.
Recientemente, el vicepresidente del BCE, el español Luis de Guindos, advirtió que la recuperación económica que anticipaba el organismo radicado en Fráncfort "no se está dando con la intensidad que esperábamos". No obstante, el español aseguró que, "si la inflación converge hacia nuestro objetivo, entonces la política monetaria responderá en consecuencia".
Por su parte, Schnabel ha indicado que ni siquiera una bajada consistente de la inflación sería suficiente para hacerla cambiar de opinión y ha subrayado que "mostraría su rechazo a una respuesta monetaria demasiado fuerte" si esta moderación se debiese a factores estructurales.
Los expertos de Rabobank señalan que, tanto la mejora de las condiciones crediticias como las mejores condiciones para que los consumidores gasten, son "razones suficientes para que tomemos con cautela las débiles encuestas PMI de servicios de los últimos meses, ya que su descenso puede deberse en parte a factores estacionales (mucho menos visibles en la encuesta de clima empresarial, por ejemplo)".
"Esto es algo que ya señalamos hace varios meses y Schnabel parece sugerir lo mismo al afirmar en la entrevista que las encuestas no siempre han sido indicadores muy fiables en los últimos tiempos. Por supuesto, las tensiones comerciales que se avecinan podrían suponer un importante quebradero de cabeza para la economía de la Eurozona, pero la reciente debilidad del euro ya compensa en parte esta situación. Los comentarios de Schnabel coinciden con nuestra previsión de un recorte de 25 puntos básicos en diciembre, en lugar de los 50 puntos que los mercados han estado barajando en los últimos meses", sentencian.
En relación con esto, la presidenta del BCE, Christine Lagarde, aseguró este jueves que la subida de aranceles prometida por Donald Trump, el presidente electo de EEUU, sería contraproducente para la economía europea y global.
"Una guerra comercial en general, sería negativa para todos, no solo para los destinatarios de los aranceles estadounidenses. Cuando se empieza a considerar una guerra comercial, pronto se puede ver una escalada, lo que en mi opinión es negativa en términos netos. Esto puede no beneficiar a nadie, ni a Estados Unidos ni a Europa, ni a nadie en realidad, ya que provocaría una reducción global del PIB", ha reconocido en una entrevista concedida al diario Financial Times.
La banquera ha añadido que "Donald Trump anunció claramente la semana pasada la magnitud de los aranceles que tiene en mente: 60% para China, 10-20% para el resto del mundo. Pero no ha sido muy específico sobre el alcance y la base sobre la que se aplicarían esos aranceles".