El escándalo de la llamada de Trump provoca la dimisión del enviado para Ucrania
El escándalo de la llamada telefónica entre el presidente de EEUU, Donald Trump, y su homólogo ucraniano, Vladímir Zelenski, se ha cobrado la primera víctima: la dimisión del enviado especial estadounidense para Ucrania, Kurt Volker. Según informa este sábado la prensa local, Volker presentó el viernes por la noche su renuncia, tras filtrarse que ayudó a organizar una reunión entre el entorno de Zelenski, y el abogado personal de Trump, Rudy Giuliani para sacar "trapos sucios" del candidato demócrata Joe Biden.
De hecho, los demócratas de la Cámara de Representantes habían anunciado que citarían a declarar a Volker el día 3 de octubre en el marco del juicio político (impeachment) contra Donald Trump. Su nombre apareció mencionado en la queja interna que un funcionario de inteligencia presentó sobre la llamada entre Trump y Zelenski el pasado 25 de julio, un documento que se hizo público este jueves.
Según la queja, el enviado especial para Ucrania fue uno de los funcionarios estadounidenses encargados de "contener los daños" ante Kiev, ayudándolos "a navegar" en la relación con Trump y con su abogado personal, el exalcalde de Nueva York Rudy Giuliani, a quien describe como "figura central" en la trama. Volker habría introducido a Giuliani ante el Gobierno de Zelenski, que asumió el poder en mayo.