Berenberg: "Un cambio de Gobierno en España no se traducirá en mucho dolor"
Esta semana, España decide qué rumbo seguir en los próximos 4 años. El domingo, hay una cita con las urnas para determinar qué signo tiene el futuro Gobierno del país en unos comicios que solo se pueden entender en clave de pactos. Del lado progresista, PSOE y Sumar aspiran a reeditar la coalición que ha llevado el timón del país durante unos años marcados por la pandemia del Covid-19 y la guerra de Ucrania. Del lado conservador, el Partido Popular se erige como el principal contendiente y posible ganador de las elecciones, aunque todo apunta a que necesitará los votos de los diputados de ultraderecha de Vox para formar Gobierno. Sea cual sea el resultado, Berenberg cree que un cambio de signo político en España "no se traducirá en mucho dolor".
Esto se debe al "balance mixto" que los expertos de la firma germana creen que arroja la economía española. Según estos analistas, España "va a la zaga de sus homólogas", a pesar de que el Producto Interior Bruto (PIB) del país creció un 0,6% en el primer trimestre de 2023, una décima más de lo inicialmente previsto. "En el primer trimestre de 2023, el PIB real era apenas un 0,1% superior al del cuarto trimestre de 2019, antes de la crisis del Covid-19 y momento en que el actual Gobierno tomó posesión", detallan desde Berenberg.
No obstante, la mayoría de las valoraciones son más optimistas que las de la firma alemana. La vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, ha asegurado recientemente que, "con los datos que tenemos del primer semestre", es "evidente" que España crecerá "por encima de la previsión de crecimiento del Gobierno" del 2,1%, al tiempo que ha remarcado que "eso es lo que ven todos los organismos".
En este sentido, el Banco de España ha elevado el crecimiento anual al 2,3% y ha rebajado la inflación esperada para final de año, mientras que la OCDE lo ha subido hasta el 2,1%. Por su parte, BBVA Research calcula que la economía española crecerá un 2,4%, mientras que el Consejo General de Economistas y la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) cifran el repunte del PIB en el 2,1% y el 2,3%, respectivamente. La última estimación de Bruselas, que data del pasado 15 de mayo, elevó el crecimiento de España hasta el 1,9%, cifra que estima Deutsche Bank.
No obstante, Berenberg se aleja del tono positivo generalizado al hablar de España. Por ejemplo, la firma alemana destaca que, desde el cuarto trimestre de 2019, "el PIB agregado real de la eurozona se expandió un 2,2% y la economía del vecino, Portugal, se hinchó un 4,4%" frente al peor comportamiento de España.
"Y ello, a pesar de un estímulo fiscal mucho mayor en España, donde la deuda pública pasó del 98,2% del PIB en 2019 al 113,2% en 2022 (+15%), frente al aumento de 7,5 puntos porcentuales en la eurozona, hasta el 91,6%. Portugal incluso logró reducir su ratio de deuda en un 2,7%, hasta el 113,9% y, a diferencia de España, es probable que en los próximos años tenga unos presupuestos prácticamente equilibrados", añaden.
De igual modo, la firma germana resta importancia a los datos del mercado laboral español, a pesar de su "creciente proporción de empleos indefinidos" y de que la tasa de desempleo se redujese del 13,9% en noviembre de 2019 al 12,7% en junio de 2023, según datos de la Comisión Europea. "Sin embargo, sigue siendo muy superior a la de la zona euro (6,5% de tasa de desempleo), Portugal (6,4%) y Alemania (2,9%)", apuntan desde Berenberg, al tiempo que subrayan que, "para cerrar la brecha, España necesita más reformas estructurales, no gasto público".
Cabe señalar que, en junio, el número de personas desempleadas en España bajó de los 2,7 millones (2.688.842) por primera vez desde septiembre de 2008 y sumó 14 meses de forma ininterrumpida por debajo del umbral de 3 millones de parados. Además, la Seguridad Social registró nuevo récord de afiliación al sumar 54.541 ocupados y se quedó al borde de los 21 millones de afiliados (20.869.940, +2,56% interanual).
Por otro lado, el desempleo femenino se situó también en su nivel más bajo desde 2008 (1.624.317 personas) y el masculino descendió un 1,8%, hasta los 1.064.525 parados. En cuanto al desempleo juvenil, en junio se volvió a registrar un nuevo mínimo histórico. Los menores de 25 años inscritos en el SEPE se redujeron a 184.491 personas, un 1,89 menos respecto al mes anterior.
"NO ES UN MILAGRO DE INFLACIÓN"
De igual modo, los expertos de Berenberg se han mostrado críticos con el dato de inflación de España. En junio, el país se convirtió en la primera gran economía de la eurozona en caer por debajo del objetivo del 2% del Banco Central Europeo (BCE).
Según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), la escalada de los precios se moderó del 3,2% de mayo al 1,9% en junio, su menor nivel desde marzo de 2021, mientras que la subyacente recortó dos décimas, hasta el 5,9%. En la eurozona, según datos de Eurostat, la oficina estadística comunitaria, la inflación encadenó su décimo mes de descensos y se situó en el 5,5% en junio (-0,6%), aunque la inflación subyacente repuntó levemente hasta el 5,4%.
"La inflación IPCA general en España, del 1,6% interanual en junio, ha disminuido mucho más que el agregado de la zona euro. Esto se debe en parte a diferencias estadísticas, ya que, hasta enero de 2023, los datos de inflación españoles sólo incluían los precios regulados de la energía, que se movían rápidamente, acelerando primero la subida y luego la caída de la inflación medida", detalla Berenberg.
En este sentido, la firma germana subraya que, como en el resto de la eurozona, los precios al consumo de la energía desempeñaron un "papel protagonista" en la dinámica general de la inflación en España desde que los precios del gas al por mayor de referencia en Europa empezaron a dispararse en 2021, cuando Rusia empezó a reducir sus suministros a Europa.
"La inflación aumentó antes en España (alcanzando un máximo del 10,7% interanual en julio de 2022) que en la zona euro (máximo del 10,6% en octubre) y ahora también está disminuyendo antes. Pero comparando junio de 2022 con el primer trimestre de 2021 (antes de los problemas energéticos), los precios al consumo españoles subieron un 15,3%, cerca del aumento del 16,7% en el conjunto de la eurozona", concluyen.