El oro vuelve a superar los 3.000 dólares por segunda vez en una semana
La onza de oro ha vuelto a superar los 3.000 dólares por segunda vez en la última semana mientras los inversores buscan refugio ante la incertidumbre que despierta la política comercial de Estados Unidos y del presidente Donald Trump.

El metal precioso rebasó el umbral de los 3.000 dólares por onza por primera vez el pasado viernes y ha aumentado su subida anual a más del 14%. Con todo, este no ha sido más que otro hito en la escalada alcista del oro desde la investidura de Trump en enero.
Y es que el metal precioso ha marcado un nuevo máximo 14 veces desde entonces debido a que las tensiones comerciales han impulsado la demanda de activos refugio. El índice del dólar estadounidense se ha mantenido cerca de un mínimo de cinco meses, lo que hacía que el oro fuera más barato para los compradores en el extranjero.
Cabe recordar que Trump ha postergado la aplicación de aranceles recíprocos y sectoriales al próximo 2 de abril. Asimismo, hay otras tarifas, como la del 25% a las importaciones de acero y aluminio, que ya han entrado en vigor.
"El oro sigue subiendo debido a la debilidad del dólar y las continuas incertidumbres sobre los aranceles... Con el oro en máximos históricos, hay muchas compras técnicas y basadas en gráficos, ya que no hay resistencia aparente en los gráficos", apunta el analista de Marex, Edward Meir.
BANCOS CENTRALES
De su lado, Kerstin Hottner, directora de materias primas en Vontobel, también destaca que los flujos hacia fondos cotizados (ETF, por sus siglas en inglés) de oro siguen siendo "limitados" debido a los altos costes de oportunidad derivados de las tasas de interés elevadas.
En este sentido, la reunión de este miércoles de la Reserva Federal (Fed) no ayudará a aliviar el temor a las menores expectativas de recortes de los tipos de interés, ya que el mercado espera una nueva pausa por parte del banco central estaodunidense. Por tanto, el foco no está puesto en la decisión en sí misma, sino en lo que tenga que decir el banco central sobre la trayectoria de la inflación y de la marcha de la economía estadounidense.
Les recordamos que la Fed actualizará su diagrama de puntos y también dará a conocer sus proyecciones económicas. Como ya saben, el banco central estadounidense se ha mostrado muy cauto y ha reiterado en repetidas ocasiones que se mantendrá a la espera de ver cómo afecta la política arancelaria de Trump a la inflación y al crecimiento económico.
Cabe recordar que la Fed redujo en diciembre su previsión de recortes de los tipos de interés a solo dos frente a los cuatro que esperaba en septiembre. Por su parte, los datos de la herramienta FedWatch de CME todavía cree que podría hacer uno o dos recortes más de los previstos.
Por otro lado, Vontobel apunta que las compras de oro por parte de los bancos centrales de mercados emergentes han sido el "principal impulsor del precio" del oro en los últimos dos años. La gran incógnita, subraya Hottner, es si esta tendencia continuará.
"Algunos temen que un alto el fuego negociado por Trump entre Rusia y Ucrania pueda reducir la necesidad de comprar oro. La primera ola de compras se debió al congelamiento de activos rusos en dólares, y aunque un acuerdo de paz sería un gran cambio geopolítico, las preocupaciones sobre riesgos similares en otros países no desaparecerán", apunta.
Según la experta de Vontobel, hay varios riesgos si el oro permanece en este nivel. Por un lado, la demanda de joyería podría disminuir, especialmente en China, donde los precios elevados ya afectan el consumo. Además, los bancos centrales podrían adoptar un enfoque "más táctico" y esperar una posible corrección antes de seguir comprando.
"El suministro también podría aumentar debido a un mayor reciclaje de oro, que representa aproximadamente un tercio de la oferta total. Sin embargo, cualquier corrección en los precios debería ser de corta duración, ya que las compras de los bancos centrales seguirán proporcionando un sólido soporte", concluye.