El sector servicios de la eurozona registra en septiembre la expansión más débil en siete meses
El sector servicios de la zona euro registró en septiembre una expansión que fue solo modesta y la más débil en siete meses. "A primera vista, el sector servicios de la zona euro parece estar aguantando bastante bien. Sigue creciendo y la desaceleración no es demasiado pronunciada todavía. Pero si se analiza un poco más a fondo y se observa a los países individualmente, el panorama no es tan optimista, excepto en España".
En Hamburg Commercial Bank prevén que "la situación en el sector servicios de la zona euro seguirá deteriorándose".
En septiembre, el índice PMI de actividad comercial del sector servicios de la eurozona aumentó por octavo mes consecutivo. Al situarse por encima del nivel de ausencia de cambios de 50, como ha ocurrido desde febrero, la última cifra indicó un crecimiento sostenido. No obstante, cayó a 51,4, desde 52,9 registrado en agosto.
Se registraron niveles más altos de actividad empresarial a pesar de que el nivel de nuevos pedidos recibidos disminuyó. Esta fue la primera vez desde febrero que la demanda de servicios ha caído, aunque la contracción fue solo marginal. Los pedidos pendientes proporcionaron a las empresas de servicios un medio para apoyar la actividad. Los pedidos pendientes de realización cayeron por decimocuarta vez en los últimos 15 meses y en la medida más rápida desde febrero.
Los niveles de empleo siguieron aumentando. Si bien el ritmo de creación de empleo fue ligeramente más rápido que en agosto, fue más débil que el promedio observado desde que se comenzó a recopilar datos en julio de 1998.
La inflación de los precios en el sector servicios de la zona euro fue menos intensa al final del tercer trimestre. Cabe destacar que las tasas de aumento de los precios pagados y de los precios cobrados fueron las más débiles en 42 y 41 meses, respectivamente.
Por último, las expectativas de crecimiento para los próximos doce meses se fortalecieron. Este fue el primer mes desde mayo en que la confianza empresarial mejoró. No obstante, el grado de optimismo fue moderado en comparación con los estándares históricos.
"A primera vista, el sector servicios de la zona euro parece estar aguantando bastante bien. Sigue creciendo y la desaceleración no es demasiado pronunciada todavía. Pero si se analiza un poco más a fondo y se observa a los países individualmente, el panorama no es tan optimista, excepto en España", señalan en Hamburg Commercial Bank.
En este caso, "observamos la situación con asombro. Las empresas de servicios españolas están en auge, con un índice que se ha disparado hasta los 57 puntos", dicen.
Mientras, la situación en las otras tres economías líderes de la zona euro es bastante diferente: "En Francia, la actividad empresarial del sector servicios se desaceleró después del efecto de los Juegos Olímpicos y en Alemania e Italia, el crecimiento casi se estancó en septiembre. Incluso si España logra evitar verse arrastrada por las dificultades de sus países vecinos, el sector servicios de la zona euro en su conjunto parece encaminarse a un crecimiento más lento".
"En la práctica, la mayoría de los trabajadores del sector servicios aún no han sentido realmente el impacto. De hecho, la tasa de contratación se aceleró en España y Francia, e incluso en Italia el crecimiento del empleo solo disminuyó ligeramente. El panorama es más sombrío en Alemania, donde las empresas están reduciendo sus plantillas. Aquí es donde se está haciendo sentir la recesión del sector manufacturero, ya que en este entorno las empresas correspondientes están realizando menos pedidos al sector servicios", añaden.
Por otro lado, el índice PMI compuesto de actividad total de la zona euro, ajustado estacionalmente, cayó en territorio de contracción en septiembre por primera vez desde febrero. Al bajar de 51 (la máxima de tres meses registrada en agosto) a 49,6, el índice señaló una contracción marginal de la actividad total del sector privado al final del tercer trimestre.
Los tres grandes países de la zona euro (Alemania, Francia e Italia) registraron contracciones simultáneas por primera vez en lo que va de año. Mientras tanto, la demanda de productos y servicios de la zona euro cayó al ritmo más rápido en ocho meses, lo que condujo a una disminución de la cartera de pedidos por completar y a destrucciones de empleo a un ritmo ligeramente más rápido. La confianza empresarial también se debilitó ligeramente, situándose aún más por debajo de su media de largo plazo.